Cuando despertó, sintió en su garganta una picazón extraña y larga, como un raspón en la pared del alma donde salen las palabras, las risas y el miedo, si no se hubiese mirado al espejo, la sensación de tener el larguísimo cuello de una jirafa no la hubiese abandonado, pero ahí estaba: con el pelo con su orden básico, que es el que la mañana le deja sin mentiras de peines ni acondicionadores, con los ojos enormes y oscurecidos mirando por la ventana esa luna de verano que aún persiste cuando el cielo ya está clarito, sin poder sacarse esa sensación de que el tiempo se había detenido ayernoche en el momento exacto del llanto disimulado entre sábanas…así no podía abrazar a su hija y desearle un buen día, así que haciendo de tripas corazón rebuscó entre las sorpresitas de cumpleñosinfantil un caramelo y sin más pensarlo lo peló y se lo metió en la boca. De jirafa pasó a yegua, y de yegua a mamá un poquín triste, y encaró la mañana con esa sonrisa de madre que es a la vez tristeza de algo indefinido y felicidad de poder compartir la vida con una cría
(Esperanza Cabarcos)
Hola!! este es el texto que yo elegiría para premiar. Todos me parecen ingeniosos, pero este me emocionó!!
esta petisa siempre me emociona !!!
Imaginé que no me iba a defraudar