(Cuento antiprincesas para niñxs)

Cuenta la leyenda que hace mucho tiempo llegó a Esquel un Rey colonizador y malvado, lo acompañaba su hija la Princesa y un séquito de soldados racionalistas fundamentalistas que habían olvidado el amor para pensar sólo en en el oro.
Una tarde de nieve, el Rey desfilaba con su hija y los soldados hacia el cerro Tres Torres a buscar oro para la corona, cuando en el camino se toparon con un vecino de Esquel que le recitaba poesías a una gota de agua solitaria que era ahora mayor, antes una niña gota de nieve.
El vecino, levantó la vista y al ver a la Princesa le dijo que la amaba, ella sonrió, asintió con la cabeza, pero el Rey se enojó y este diálogo ocurrió a orillas de la laguna Willimanco:
– Rey: Insolente paisano, cállese.
– Vecino: El amor no se calla.
– Rey: Irrespetuoso plebeyo.
– Vecino: Ella y yo ya estamos enamorados.
– Rey: Tu no tienes el oro suficiente.
– Vecino: Tengo con mis vecines más oro que usted en esa montaña.
– Rey: Pero me lo llevaré todo.
– Vecino: No se puede, es de la montaña, del agua, el aire, el sol y de los que aún amamos.
– Princesa: Padre, estoy enamorada.
– Rey: Hija, tengo todo el oro del mundo para vos.
– Princesa: Pero yo no quiero el oro.
– Rey: Estoy harto de tanta irracionalidad, le haré una apuesta, pobre plebeyo, si usted pierde me llevo el oro y a mi hija.
– Vecino: ¿Y si yo gano?
– Rey: Me iré con las manos vacías.
– Vecino: Aquí no tenemos miedo a los colonizadores, nuestro Pueblo es mágico, sueña y construye lo imposible, acepto el desafío.
– Rey: Usted tendrá el amor de mi hija el día que las vacas caminen sobre el agua.
(Risas burlonas del Rey y sus soldados)
– Vecino: Ah, que facilito, mire usted para allá, Reynaldo, observe el la superficie de la laguna Willimanco.
Por estos tiempos se sabe que el Rey y sus soldados viven en Europa encerrados, solos y enojados.
Nuestro vecino sigue recitando poesías a las gotas de agua cristalinas solitarias, junto a la ex Princesa que ahora es feliz tejiendo bufandas de juncos para las estrellas y la luna.