
A la voz de ¡Aura, ahijuna gran seven! grito como un verdadera hombre con los ovarios bien puestos y como una hombre siento como mujer, cuando me doy cuenta que soy una histérica varón.
Desde chiquito me gustó jugar al fútbol con las muñecas y de grande como amo de casa me la rebusco, pero como matriarca varonil en casa soy quien llevo los pantapolleras a la hora de ser el sostén y el calzoncillo.
Es fácil reconocerme, soy ese macho bien hembra que como mujer que soy sueño con ser ese padre en el cual mis hijos e hijas encuentren una buena madre, en fin, welcome al mundo de los nuevos mapadres y a los pamadres.