💀 Ese bonito toque antisocial 💀

A pesar de hurgar en la biblioteca de Babel, no encuentro el libro que albergue la explicación de ese toque antisocial que me viste, desviste y masajea la espalda de mis vínculos ciudadanos.
Será la única forma de dibujar en el pizarrón la ecuación que haga comprender acerca de las bondades de Doña Soledad, eso si, cuando el almanaque, las garras de los contratos o los bocinazos de los lazos sociales acusan presencia bajo apercibimiento, se que es la hora de fingir sociabilidad y sacar los remos de Don Civilizado.
Entonces, me subo al barquito del vecino cumplidor e ingreso por el río de los saludos, los buenos modales y la camaradería a la ciudad, marco tarjeta, cumplo satisfactoriamente con mis deberes (algunos son copiados) y egreso de la jungla de concreto, geométricamente recta, para regresar a la meseta patagónica para encontrarme con ella, mi amada soledad budista.

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